Mi madre me hace la pregunta de siempre:
-¿Qué tal la escuela cariño?
-Bien mamá.-Le contesto yo con un nudo en la garganta, a pesar de haber pasado por esto muchas veces, nunca me podré acostumbrar. Antes todo era distinto, pero en ese antes estaba mi hermano Louis, desde
que murió mi hermano por culpa de un accidente de moto mi vida no ha sido la misma. No solo se murió el sino también mi madre, porque ha raíz de la perdida de mi hermano mayor mi madre entró en una terrible depresión en la que se refugió en la bebida.
Mi padre en vez de ayudarla empezó a maltratarla psicológicamente le decía que era una completa inútil, que por culpa de ella se había muerto mi hermano, que si ella no le hubiera comprado la moto sin consultarle aún seguiría vivo. Al principio solo se ensañaba con mi madre, pero después empezó a tomarla conmigo para él yo nunca seré mejor que mi hermano, para él soy un completo inútil, para él soy muchas cosas que no me apetece nombrarlas.
Cojo a mi madre del brazo y le ayudo a levantarse, le acompaño hacía su habitación y la tumbo en la cama para que descanse.
Soy Andy Miller Lopez tengo 16 años, soy alto,normal en cuanto a peso, pelo negro igual que mi padre y ojos verdes como él. Mi madre se llama Marie, es alta, extremadamente delgada, pelo castaño y ojos grises, y es la persona que más amo en este mundo, a pesar de su problema con la bebida, ella es la razón de que siga en esta casa. porque no la quiero dejar con ese hombre, mi padre, aunque hace tiempo que dejo de serlo.
Me voy ami habitación y cierro la puerta. Me quito la mochila y la chaqueta y las dejo tiradas en el suelo. Me acerco al escritorio y cojo el portatil pongo la canción de Iron Maiden The Number of the Beast :
Pongo la música a tope, me tumbo en la cama con el ordenador al lado. Cierro los ojos y empiezo a llorar en silencio. Las lágrimas caen fluidas sobre mi cara y me doy cuenta de que no puedo seguir viviendo así, sin quedar con mis compañeros. Antes era un chico extrovertido y tenía muchos amigos, en ese antes tenía 11 años y mi hermano estaba vivo. Ahora soy un chico solitario sin más compañía que la música Heavy Metal, un chico empollón que nunca se ha metido en problemas y que si faltara a clase nadie se daría cuenta, ese soy yo.
Muchas veces he pensado que si yo hubiese sido el que hubiera muerto las cosas serían distintas, en medio de mis reflexiones llega mi padre y me interrumpe.
-Tú baja esa música, acaso estas sordo.-Mi padre ha cogido la costumbre de llamarme tú en vez de por mi nombre. Mi padre es alto, fuerte, pelo negro y ojos verdes, se llama Albert y tiene 37 años, igual que mi madre
Muchas veces he pensado que si yo hubiese sido el que hubiera muerto las cosas serían distintas, en medio de mis reflexiones llega mi padre y me interrumpe.
-Tú baja esa música, acaso estas sordo.-Mi padre ha cogido la costumbre de llamarme tú en vez de por mi nombre. Mi padre es alto, fuerte, pelo negro y ojos verdes, se llama Albert y tiene 37 años, igual que mi madre