CAPÍTULO 13- ANDY

- ¡Te quiero, joder!

La tengo ahí, enfrente mío, a centímetros de mi, quiero abrazarla, besarla, pero lo único que hago es quedarme plantado ahí, mirándola embobado. Quiero que reaccione, que deje de mirar al suelo después de lo que le acabo de decir. Pero solo se oye el ruido de nuestras respiraciones.

- Sally por favor, di algo. - Le tomo de la barbilla y le levanto el rostro obligándola a que me mire a los ojos.

- Yo, eh, yo...

Sally me da la espalda, mientras mueve nerviosa las manos. No consigue artícular una frase tan siquiera.
-Te quiero, eso es lo único que sé, quiero acariciarte, abrazarte, sentirte, quiero ser la razón por la que sonríes, él que te enfade y te quite el enojo a besos, hacerte reír cuando estés triste, cuidarte, que vivamos en una burbuja donde solo seamos tu y yo. Pero eso es imposible realizarse si dos no quieren. Sé que algo sientes por mí, pero estás confundida. Sally, gracias a ti me he vuelto más seguro de mi mismo, he aprendido a no darme por vencido fácilmente, a luchar por lo que quiero y pienso luchar por ti hasta el final. Pienso ganarme tu amor y confianza a pulso, pero necesito una motivación, un incentivo para que todo mi esfuerzo no sea en vano. Sally mírame a los ojos.

Me acerco a ella en dos pasos, la giro con suavidad obligándola a mirarme fijamente a los ojos. Está llorando y no puedo evitar estrecharla entre mis brazos, sus lágrimas me mojan la mejilla.

-Joder Andy, no me hagas esto. Me encantaría estar contigo, pero ahora Dani me necesita y no puedo dejarle. Que todo lo que me has dicho es precioso.

-¿Me quieres?, solo dime eso.
La tengo a centímetros de mi y puedo oler su colonia de vainilla.
-No, no te quiero, no siento nada por ti y jamas lo haré. En todo este tiempo solo te he estado utilizando para así darle celos a Dani. 
-Tu boca dice una cosa, pero tu cuerpo dice otra cosa. 
Se ruboriza y mira al suelo con las mejillas encendidas y así, se ve preciosa, es tan hermosa cuando se ruboriza...
La acerco un poco mas hacia mi, puedo oír su respiración agitada, nuestras narices se rozan y su boca esta a escasos milímetros de mi boca. Quiero besarla, tiene unos labios carnosos y rosados. La miro a los ojos y es como si me suplicara que no lo haga, pero tampoco hace ningún ademan de que no quiere, no forcejea ni nada. 
En el fondo se que quiere que lo haga, lo desea tanto como yo. Pero también es consciente de que a unos escasos metros de nosotros, esta su novio postrado en la cama. 
La suelto, ahora puede irse sin que se lo impida, pero no lo hace y yo tampoco me muevo. 
-Lo siento, Andy...
Y se aleja por el pasillo, mis ojos la siguen y justo cuando ha llegado a la puerta de la habitación en la que se encuentra Dani, se gira y me mira. 

CAPÍTULO 12 - SALLY

Tienes un minuto, quiero hablar contigo.

-Si claro díme.

   -Sino te importa prefiero que sea en persona.

-Vale, a las seis en la plaza.

   -Hasta luego.

-Hola.

Estoy cansada, un poco enfuruñada. 

-Hola, huumm... ¿Qué tal?

 -Bien, ¿qué era eso de lo que querías hablar conmigo?, no tengo mucho tiempo.

   -Más bien eeemm... te quería eemm... enseñar una cosa, -.

Saca de la funda la guitarra, le echo una mirada de aspiración, acompañada de unas palabras que le podrían quitar toda la ilusión y las ganas que tenia de contar algo a cualquiera. 

    -Si quieres que escuche una canción que acabas de ensayar, olvídalo, como ya te dije no tengo tiempo. Si supiera que era por eso, creemé que no hubiera venido.

Le veo irse, con su guitarra a cuestas y cabizbajo. Se que he sido dura, quizás mucho y el  no se lo merece. Quiero correr a buscarlo y que me cante esa canción. Quiero escapar de todo eso, y perderme o esconderme por un tiempo para olvidar todo esto. 

Mi cabeza está en un dilema, ¿corro y voy a buscarlo o le dejo ir?. Una parte de mí siente algo muy raro, difícil de explicar por el. No se si eso estará bien. 

Tarde, ya es tarde para ir a buscarlo, algo dentro de mi se relaja, parece aliviado de que no allá corrido a buscarle, de que no haya dado un paso que pudiera haber cambiado mucho las cosas. 

Desenredo el camino tomado, pero esta vez de vuelta a casa, perdida, confusa. 

Quizás eso sea lo mejor para los dos. Noto en su mirada, la forma de ser conmigo que puede que sienta esa cosa rara difícil de explicar por mi al igual que yo por él. Si estoy en lo cierto y no me equivoco, es lo mejor para los dos. 

-Sally cariño, ¿dónde estabas? 

-Dando una vuelta.

-Podrías haber avisado.

-¿Qué pasa, no puede una salir a dar una vuelta tranquílamente sin que le molesten a la vuelta? solo he tardado tres cuartos de hora

-Estas insoportable últimamente, no se puede hablar contigo.

-¡¿Insoportable?!, te equivocas, estoy harta de todo y de todos, ese es mi problema.-
 Me voy a mi cuarto. 

Subo las escaleras corriendo, no se que me pasa. Las lágrimas se asoman por mis ojos y les doy vía libre, noto como bajan por mis mejillas. Son incontratables. 

Necesito a Cloe, ella sabe como ayudarme cuando estoy mal. Pero cuesta coger el móvil para llamar a esa mejor amiga, de la que has estado pasando todo este tiempo, solo porque necesites que te consuele, que te ayude, te apoye y te diga que todo esto pasará, y ella estará ahí siempre. Cuesta marcar ese número que tan bien te sabes. Y saber que si se enfada, o no quiere, la culpa la tienes tu y solo tu. No es posible ignorar a una persona todo este tiempo, y pretender que las cosas vuelvan como antes sin más, sin haber echo nada. Eso cuesta y lo sé. 

Pero también sé, que Cloe estará ahí, a pesar de todo. Que si la llamo vendrá, pero hasta para eso soy cobarde. No quiero que venga porque me daría vergüenza, y sabría tan bien como ella, que es por egoísmo, que la quiero aquí ahora por eso mismo.

   

-¡Mamá! me voy al hospital a ver a Dani.

Un nuevo día. Ayer no fui capaz de realizar la llamada, soy cobarde, lo sé, lo sabemos.

-Hola Dani. 

Se que no puede oírme, ni verme, y en el hipotético caso de que me oiga, sería como en sueños. Pero me siento bien hablando con el, aunque el no me responda. Puedo contarle too lo que siento, lo que me pasa. Parecerá absurdo, quizás loco. 

Me acerco a el, se ve como un ángel así dormido, mis manos se posan en su cara, acariciando ese precioso rostro. Mis dedos rozan sin querer sus labios y siento una especie de cosquilleo, no sabría como explicarlo. Cuantas veces habré soñado de pequeña con el, siempre me ha gustado, desde pequeña. Me sentí la persona más feliz del mundo aquel día en el que empezamos a salir, pero luego las cosas se estropearon, fue cambiando. 

Me doy la vuelta y ahí está el, de pie, con una rosa en la mano. Siento mis mejillas ardiendo, y para disimularlo, miro de nuevo a Dani.

-Hola. 

-Hola, ¿qué haces aquí?

-Quería hablar contigo, me imaginé que estarías aquí. -Se acerca a mi y me agarra del brazo, de manera delicada. -Sally, lo necesito enserio, necesito hablar contigo.

CAPÍTULO 11 ANDY

Llevaba días pensando en Sally, ocupaba la mayor parte de mis pensamientos. Sabía que estaba saliendo con Danny y eso me dolía. Pero también era consciente de que algo no iba bien. Por mucho que ella se negara a reconocerlo y a contestar otra cosa que no fuese ese escueto "bien". En el poco tiempo que llevaba ahí, había pasado mucho tiempo con ella. Se había distanciado mucho de Max y Cloe desde que empezó a salir con Dany, pero yo había hecho lo imposible para conseguir ganarme su confianza. No podía perderla. Desde el primer día en que nuestras miradas se encontraran, me di cuenta de que no podía dejarla y tampoco quería.

La quería y eso era lo único que sabia. ¿El motivo?, no sabría que decir.

Llevo unas horas con el libro que me acabo de comprar, leo, pero no me concentro y decido cerrarlo.

Me levanto de la cama y cojo el portátil y vuelvo a ella. Entro a Google buscando que se yo... y me encuentro con:

"One Direction estrena álbum nuevo, Take Me Home,  que ha arrasado en tan pocas horas con su tema Live While We´re Young, los 4 ingleses y el único irlandés, han conseguido vender millones de copias en tan solo unas pocas horas".

Voy a Youtube y busco su nombre y el de la dichosa canción. La verdad es que cantan muy bien. Justo cuando estoy a punto de salir de ahí al escuchar la canción, veo un comentario de una chica que dice que ese tema se queda corto comparado con Little Things.

 De nuevo busco la dichosa canción por curiosidad. La verdad que la chica tiene razón, me digo a mi mismo. Es perfecta para una chica.

Decido coger mi guitarra y cantarla haber como me queda. Y en medio de la canción entra mi tía. Y se queda en medio de la puerta en silencio hasta que acabo de tocar.

   -No sabia que tocaras y cantases tan bien.

   -Bueno, no te pases que no lo hago también, y sobre todo cantar.

   -No seas modesto, cantas muy bien. Bueno, pero para quien es esa canción tan bonita.

   -Para nadie, lo acabo de escuchar en Youtube y decidí cantarla haber como me quedaba. -Mi tía se echa a reír y yo me sonrojo.

Quizás tenga razón, cuando la estaba tocando solo pensaba en Sally.

  -Se que es para alguna chica, se te nota en la cara. Hay la juventud de hoy en día         -suspira-. Venía a  avisarte que ya es hora de comer, venga apaga eso y vamos a comer.

    -Tienes un minuto, quiero hablar contigo.

-Si claro díme.

   -Sino te importa prefiero que sea en persona.

-Vale, a las seis en la plaza.

   -Hasta luego.

Al realizar la llamada estaba casi seguro de que me diría que no, que no tenía tiempo y qué se yo...

Falta una hora y yo no paro de ir de una lado para otro de la casa, hasta que decido volver a mi habitación, vuelvo a reproducir la canción de Little Things, cojo la guitarra y vuelvo a cantarla, en cada nuevo intento noto que las letras de la canción salen fluidas, cada nuevo intento es mejor.

Había escuchado hoy por primera vez esa canción, y ahí estaba cantándola como si me la supiera desde siempre, la he cantado tantas veces hoy, que me la he aprendido.

Miro el reloj, falta media hora, ya es hora de irme...

-Hola.

Un ''hola puede demostrar fácilmente el estado de ánimo de uno. Depende de como lo digas puede dar a traslucir a los demás si estás triste, cansado, alegre... El ''hola'' de Sally daba a traslucir un cúmulo de sentimientos muy mezclados. Transmitía tanto tristeza como cansancio y una alegría totalmente falsa, acompañado con una sonrisa forzosa.

    -Hola, huumm... ¿Qué tal?

 -Bien, ¿qué era eso de lo que querías hablar conmigo?, no tengo mucho tiempo.

   -Más bien eeemm... te quería eemm... enseñar una cosa, -odio no poder decir una frase entera sin tartamudear.

Saco de la funda la guitarra, Sally me echa una mirada de exasperación, acompañada de unas palabras que me quitan toda la ilusión y las ganas que tenia de cantársela. Que iluso, ¿acaso me creía que le iba a gustar por esa canción?

    -Si quieres que escuche una canción que acabas de ensayar, olvídalo, como ya te dije no tengo tiempo. Si supiera que era por eso, créeme que no hubiera venido.

Me quedo cortado, vuelvo a enfundar mi guitarra y me doy media vuelta.

Mientras me repito una y otra vez "imbécil". Pero con la esperanza o la ilusión de que rectifique y me pida disculpas y que se la cante. Pero eso no sucede,

CAPITULO 10- SALLY

No podía, por más que lo intentaba no soportaba la idea de ver a Dany conectado a un motón de cables, y que gracias a esos cables seguía con vida. 
Siempre he odiado los hospitales, es como si la muerte estuviera esperando en en cada esquina al acecho de su próxima presa.
Dany esta ingresado en la UCI, según los médicos ha ingerido una gran cantidad de pastillas. Le hicieron un lavado de estómago, pero a pesar de eso seguía en coma. No se sabía si se iba a recuperar o..... No quería imaginar la otra opción, ni siquiera saberla.
Quería salir de ahí y meterme en la cama de mis padres acurrucarme como cuando era pequeña. No soportaba estar ahí, en cualquier sitio en el que fijaba la vista, la mayoría de la gente estaba llorando y los que no tenían caras largas. Decidí acercarme a la madre de Dany. Era la que peor lo estaba pasando, su marido estaba de viaje de negocios, y llegaría pasado mañana. Estaba sola de pie. Serena, pero me imaginaba que seguramente estaría rota por dentro.
Cuando ya estaba frente a ella, sin decir ni una palabra le di un fuerte abrazo. Y ese abrazo hizo que se desmoronara y empezara a llorar, en parte lo agradecí, no es bueno guardase todo, pero mi otro yo quería que volviese esa mujer fuerte y serena. Necesitaba que alguien me consolara, no al revés.
-¡Ey!, no llores, ya veras como se recupera. Saldrá de esta estoy segura. -No me gusta ver a la gente llorar, porque también  empiezo yo a llorar.
Nos quedamos un buen rato así las dos llorando. Hasta que vinieron Cloe, Max, Andy y mi hermano Liam. Dejamos a Liam hablando con la madre de Danny. Fue un alivio, poder estar con mis amigos de nuevo. 
Cloe vino corriendo hacia mi y me abrazo. Lo necesitaba, necesitaba a mi amiga, la que siempre había estado ahí, en los malos y buenos momentos. 
-No llores tonta, eso no cambiara las, cosas y Danny no querrá verte así de horrible con ese careto cuando despierte. Sally, sonríe, que me duele mucho verte así. 

Max y Andy estaban hablando apartados del resto. Andy no prestaba mucha atención a lo que le decía Max y no hacia mas que mirarme cada,segundo. Me daba cuenta de eso y eso hacia que me pusiera nerviosa. 

CAPITULO 9- SALLY

<<Dos días después de haber haber "hablado" con Cloe, decidí llamarla, era mi mejor amiga, mi hermana y la necesitaba.
Hablamos muy poco y quedamos en vernos en su casa. Me puse algo cómodo.

                                       
                                            
 No me di cuenta de que iba medio corriendo cuando llegue a su casa y empecé a jadear, parecía un perro. Llamé al timbre y me abrió la madre, la madre de Cloe era una mujer super maja, es como una doble de Cloe. 
-Hola Sally, cuanto tiempo. Cloe esta arriba en la habitación -me da dos sonoros besos en la mejilla.
-Hola Mandi
Cuando estoy a medio camino subiendo las escaleras, Mandi la madre de Cloe me dice lo típico, que salude a mi madre y bla bla bla...
Entro en la habitación sin llamar, Cloe y yo nunca lo hacemos, tenemos ambos el permiso de entrar en la de la otra sin llamar. Me doy cuenta que esta algo sorprendida de que halla venido, supongo que se imaginaba que no lo iba a hacer.
Siento unas ganas enormes de abrazarla y llorar en su hombro, pero me contengo, tengo que hablar con ella. 
le cuento todo, sin omitir ningún detalle, Cloe me aconseja que le deje, pero ella no comprende lo importante que es Dany para mi. 
-Joder tía, mejor lo dejamos que parece que no hay manera de convencerte. Venga voy a decirle a mi madre que llame a la tuya para que le diga que te quedas a dormir.
Le doy un abrazo y me echo a llorar eso era precisamente lo que quería.
-Mira chavala, no quiero ver una lágrima mas. 
-No te quejes que solo te he dejado un poco de moquillos en la camisa. -le dije yo riéndome.
-Y te parece poco. Si es que, que paciencia hay que tener dios mio. Hija pareces un monstruo cuando lloras.
Justo cuando le iba a responder, sonó mi móvil. 
-Hola, ¿es usted la señorita Sally Smith? -pregunto una voz de mujer.
-si, bueno si -conteste mientras le decía a Cloe que esperara, porque la muy plasta no hacía más que preguntarme quien era.
-Le llamamos para informarle de que su novio Dany, ha sufrido una sobredosis de droga y...
dejé caer el móvil, no podía seguir escuchando, me eche a llorar desconsoládamente. Cloe se dió cuenta de que algo iba mal y decidió coger el móvil y hablar con la chica. 

CAPÍTULO 8- SALLY

La calle está repleta de gente que va a todo correr, supongo que a algún lugar. Nadie se fija en el de al lado. Y para colmo llueve. Se supone que debo de estar acostumbrada a la lluvia, pero no es así, odio la lluvia. Sin embargo hoy no, no me fije en esto, ando sin un rumbo fijo, y con la cabeza pensando en muchas cosas, mientras mis lágrimas se mezclan con la lluvia. Voy sin paraguas, pero eso da igual, solo quiero desaparecer. Que estúpida había sido, mira que creerme que yo le gustaba . Empezaré desde el principio.

<< -Te quiero Sally- Al oír esas palabras de Dany me sentí como flotando en una nube, cuanto tiempo había estado esperando ese momento, esas dos palabras y ese beso, el beso.

Ahí estaba, bailando con el mejor amigo de mi hermano, después de haberle organizado una fiesta sorpresa a este. Me sentí por fin completa, estaba en brazos de el chico mas guapo del mundo, al menos para mí. Y mi sueño se había echo realidad. ¿Cuantas veces había soñado con este momento? , no sabría decirlo. Pero eso ya no importaba, lo que importaba era el momento, ya no existía mas personas. Solo el y yo.

No sabia que responder entre otras cosas porque no me salían las palabras, y como repuesta le bese con ganas, fue un beso increíble.

Un día antes de la fiesta sorpresa de mi hermano, Andy se ofreció ayudarnos, a Max, a Cloe y a mi. La verdad que era un chico muy majo y simpático. Mi hermano no se lo podía creer, la que habíamos montado.

Después de ese TE QUIERO Dany y yo no parábamos de morrear nos, el me apretaba contra el. Seguimos bailando super pegados el uno contra el otro, parecíamos una sola persona tío. A mi hermano se le ocurrió venir a romper el hechizo y llevarse a Dany, me quede desconcertada y menos mal que vino Cloe a rescatarme, bueno, a arrastrarme hacia un rincón de la pista del baile.

-Tía que fuerte, ¿cuando pensabas decírmelo?, joder, os habéis comido la boca de una forma, que cerdos- a pesar de todo yo sabia que se alegraba un montón por mi.

-Chist... calla..., ni yo lo sabia –dije riéndome.

-No entiendo para que me mandas callar, como si no se hubiese dado cuenta ya alguien. Con el espectáculo que habéis dado -Cloe empezó a imitar un beso exageradamente y empezamos a descojonarnos las dos.

-Hola chicas – dijeron Max y Andy a la vez, este último estaba un poco nervioso. -¿Estarás contenta no?- dijo Max descojonandose.

Me dieron unas ganas de estrangularle tremendas, vaya capullo. -Pues si, y mucho -conteste fulmiándole con la mirada

-Tranquila fiera, no te lo tomes así, aunque una cosa, ¿por qué se ha llevado Liam a Dani?

En eso Max tenia razón, aunque más o menos me imaginaba el porque. Como a Liam se le ocurra hacer el papel de hermano mayor hoy, le corto los...

Me quede mirando la pista de baile, haciendo caso omiso a los chicos. Parecía que la gente se lo estaba pasándolo bien. Muchos estaban en un rincón dándose el lote. Me fije en Rachael, la chica más guapa de la clase, estaba guapísima, llevaba una falda tubo de color azul eléctrico ajustado, y una camiseta ajustada y con un buen escote.

Estaba bailando con mi primo Louis, un ligón donde los haya, mi primo no hacia más que meterle mano y la muy tonta se hacia como la que no quiere. En un momento mi primo introdujo su mano debajo de su camiseta y Rachael dio un pequeño gritito, pero se dejo hacer.

Me di cuenta de que Andy me observaba y me puse nerviosa. Vale que era guapo y majo, pero el chaval tenia un no se que. Me cogió de la mano y me llevo a rastras al baño de los chicos. Que les ha dado a todos hoy por arrastrarme.

-¡Hey!, ¿pero que haces? -le grite.

-Solo... quería hablar... contigo.. lo siento por haberte asustado -el chaval estaba súper cortado y me dio pena, que borde he sido.

-No la que debe disculparse soy yo por ser tan borde, dime, de que querías hablar conmigo.

-De Dany, no te fíes de él, el no te quiere.

-Vete a la mierda chaval, solo llevas una semana aquí y te crees con derecho a criticar, no conoces a Dany , es él mejor amigo de mi hermano, y jamás me haría una cosa así, encima ¿tú que sabes?, ¿quién te lo ha dicho? -Le espeté furiosa.

-Solo te voy ha decir lo que se, y no me lo ha dicho nadie, Dany a apostó con un amigo suyo que se acostaría contigo en menos de un mes, y encima tiene novia, si quieres pregúntaselo a tu hermano. Si no me crees es tu problema, pero yo solo quiero ser sincero contigo, porque me pareces una chica estupenda. Pero ya veo que también eres muy ingenua, ¿no te parece raro que de la noche a la mañana este colado por tus huesos?, en serio utiliza la poca inteligencia que tienes. -dijo el tranquilo pero sereno. Dio media vuelta y me dejo ahí plantada

Me quede descolocada, ¿de qué iba este?, seguro que es mentira, encima Liam me contó que Dany había cortado con su novia. Seguramente Andy había oído mal o es un mentiroso. ¿Aunque para que iba a mentirme?, mil y unas preguntas acudían a mi cabeza pero ninguna con respuesta. ¿Para que iba a postar eso Dany? ¿Qué ganaba con eso? ¿Me quería de vedad? Decidí creer a Dany después de haberme comido bien el tarro. Conocía a Andy desde hacia mas tiempo y jamas me había mentido, en cambio solo conocía a Andy de hacia una semana, y a pesar de haber pasado toda esa semana pasada con nosotros seguía siendo prácticamente un desconocido. Encima me había llamado tonta el muy cabrón. Joder no para de decir palabrotas.

-Te quiero -dijo mordiéndome el labio inferior

Antes habría sido distinto, había pasado ya una semana desde lo de la fiesta y ahora los “te quiero de Dany, no me los tragaba del todo. Cuando se acabo la fiesta y todos se habían marchado, Liam nos fuimos de la discoteca. Le pregunte de que había hablado con Dany, al principio no me lo quería decir, pero mi poder de convicción en muy eficaz. Acabe sonsacándole cosas y en vez de aliviarme me dejo mas desconcertada. Según el tenia que estar alerta con Dany, no me decía que lo dejara ni nada, pero que no tenia que fiarme mucho de el, me puse furiosa, no me lo podía creer, esperaba que Liam me dijera que estaba super contento, que le parecía muy bien que prefería a Dany antes que a cualquier otro, lo que menos me imaginaba es que me dijera que no me fiase de el, que había cambiado.

Seguimos besándonos, intente a apartar mis pensamientos de la cabeza, pero no podía, me deje hacer hasta que Dany intento quitarme la camiseta, me puse nerviosa y le di un empujón. Estábamos sentados en la hierba, junto a un pequeño riachuelo apartado de la ciudad.

-A ti que te pasa -me espeto Dany furioso.

-Eeeem... lo siento, es que... no se no... creo que este preparada... ni que sea el momento -dije nerviosa, me dio miedo Dany en ese momento y quise salir corriendo, pero mis piernas no me obedecían. Nunca le había visto así a Dany.

-No lo siento yo, por haberte hablado así hermosa -me dijo atrayéndome hacia el.

Después de ese incidente, todo fue super bien, no paraba de decirme que me quería, que era la única que le entendía, que era especial.

Pasaron los días y todo iba bien a momentos, había veces es las que Dany se ponía muy violento, pero las compensaba muy bien. Un día le encontré unos polvos blancos en su chaqueta y se excuso diciendo que era de un amigo, yo le creí como una ingenua.

Una semana mas tarde, sorprendí a Dany esnifando cocaína, le dije que no seguiría con el si no dejaba eso, y que si seguía así hablaría con su madre. Empezó a decirme que le perdonara, que era la primera vez que lo hacia y que por favor no se lo dijese a sus padres. Yo insistí que no le creía y que se lo diría, perdió los nervios y me dio una bofetada. Intento arreglarlo como siempre, pero esta vez no funciono y me fui, pero a los dos días de eso acepte hablar con el y me contó todo, y como no la tonta de Sally le perdono.

Llevábamos un tres meses saliendo y práctica mente no veía a mis amigos, sino era fuera de las clases.

-¡Sally! -me dí la vuelta y ahí venía Cloe corriendo, no tenia ganas de hablar con ella. Solo quería salir de allí, ir a mi casa y olvidarme de todo y de todos, menos de Dany.

Me encontraba en una espiral muy rara, a veces solo quería estar con Dany y otras lo detestaba.

-Hola -salude con muy pocas ganas. -¿Qué quieres?, que tengo prisa -le espete secamente.

Cloe me dio un abrazo, al principio me quede rígida, pero al cabo de un minuto me di cuenta de cuanto necesitaba ese abrazo y ella lo sabia. Me derrumbe y empecé a llorar a moco tendido. Sentí ganas de contarle todo, como antes. Pero no podía, aunque le necesitaba. Cloe siempre había sido mas que una amiga, era mi hermana, aunque no tuviésemos la misma sangre.

-Te quiero Sally, quizás no quieras hablar o contarme lo que te esta pasando, solo quiero que sepas que estoy aquí para cualquier cosa, si quieres hablar en cualquier momento llámame, da igual a la hora que sea. Aunque sea a las tres de la madrugada, no importa, estoy ahí para lo que quieras, necesites no lo olvides. -Dicho esto se levantó y se fue, la conocía también que sabia que ella también se iba llorando.

CAPÍTULO 7- ANDY

Cojo las dos maletas que están encima del armario, las tiro en la cama, abro una, la de color azul. Empiezo a sacar las cosas de mi armario y a meterlas en la maleta mientras pienso en la conversación que mantuve con la asistenta social hace dos días.

"-Andy, para empezar decirte que lo siento y que cualquier cosa cuenta conmigo. Quizás no lo supieras, pero yo conocía a tu madre -al ver que muevo la cabeza en señal de negación continúa - eramos muy buenas amigas pero nos distanciamos cuando yo me fuí a la universidad y ella se casó con tu padre. Como tu bien sabes tu padre está ya en la cárcel y tienes dos posibilidades, quedarte aquí en Oxford en una casa hogar o irte a Londres con tus tíos -su tono de voz es suave .- Una cosa más, quisiera preguntarte si llegarás algún día a perdonar a tu padre, se que es difícil pero, perdonar no es justificar ni liberar al otro de culpa y cargo. Perdonar significa liberarse de todos esos sentimientos o emociones negativas que nos perjudican. No es bueno que guardes rencor.

-Me iré a Londres, y no se si le llegaré a perdonar".
Le doy mil vueltas a lo de perdonar, ¿Qué es el perdón? Una vez leí que el perdón es un regalo que hacemos a las personas que queremos, pero lo más importante es ¿Le quiero? Antes cuando era pequeño adoraba a mi padre, pero siendo sincero creo que lo único que siento por el es odio y rabia, es lo único que se merece por mi parte. En menos de media hora consigo empaquetar todas mis cosas.
Abro la puerta y me dirijo hacía la habitación de mis padres, en cada parte recuerdo lo sucedido dos noches atrás y empiezo a llorar, me llegan mucho sentimientos, recuerdos. Abro la puerta y es como si viera el cuerpo de mi madre en la alfombra, es duro recordar su cara llena de sangre. Y me acuerdo de lo que me dijo antes de morir <TE QUIERO> me alegro que esas hayan sido sus últimas palabras, que fueran dirigidas a mí.
Mañana será un nuevo día, una nueva ciudad, gente nueva. Hoy dejaré esta ciudad en la que perdí a mi familia, la ciudad que me vio nacer y de la que no pienso volver jamás, total no tengo nada aquí, no tengo amigos. Puede que eche de menos buenos momentos de mi infancia, los besos y abrazos de mi madre, las risas con mi hermano, siendo sincero, también echaré de menos los momentos con mi padre. Y puede que quizás algún día le llegue a perdonar todo el daño que me a echo, sus desprecios, sus insultos y tal vez que me quitara a la persona que más quería. Puede que fuera una alcohólica, pero la quería más que a nadie en este mundo y no se si eso se lo llegaré a perdonar de corazón. 
Lo único que deseo llevarme de mi madre es su recuerdo tal y como me lo pidió que la recordará como ese día en el que pude estar con ella por última vez. 
Me llevó todos los buenos recuerdos. Quizás llegue a ser como el camaleón que tiene varias capas, hoy me mudaré de capa al igual que él. Seré ese Andy de antes, el divertido, el extrovertido y sobre todo ese Andy sincero que tenía muchos amigos.
Hay una pregunta que leí por ahí y me gustaría hacérosla:

Al final del camino de la vida, no te preguntarán "que tienes", sino "quien eres" ¿Cuál será tu respuesta? 

Si esta pregunta me lo hubieran echo antes, quizás no hubiera sabio que responder, pero ahora lo tengo claro. ¿Quien soy?, Pues soy un chico que a pesar de todo lo que ha vivido nunca se ha rendido y a sabido seguir hacia adelante. Cuando menos lo esperamos, la vida nos pone una prueba, muchas veces esa prueba puede llegar a ser muy dura pero siempre hay que intentar superar esas pruebas con una sonrisa. "Cuando la vida te presente razones para llorar demuéstrale que tienes mil y una razones para reír. Así que ya sabéis lo difícil no es la prueba que os pongan sino como lo afrontáis. Muchas veces lo más fácil es lamentarse de uno mismo pero a la larga resulta ser la más difícil 
Seguro que os estoy aburriendo con mis chorradas, os entiendo. Pero no os preocupéis no os molestaré otra vez con mis reflexiones.

Miró por la ventana del coche, viendo el paisaje con los auriculares puestos, me dirijo a Londres, esa ciudad a la que miles de personas quisieran visitar. Nunca he estado en Londres. Me encanta la historia y tengo la costumbre de leer siempre cosas sobre los sitios que visito, aunque en este caso no sea una visita, hoy formaré parte de esta ciudad bulliciosa.
-Ya casi estamos - me informa mi tía Holly que va de copiloto, al lado de mi tío Mike.
Me fijo en sus manos y me doy cuenta de que está temblado, seguramente este nerviosa, porque tampoco nos conocemos mucho.
-Ya, ¿Como es Londres?, Me he informado un poco, pero me parece que no lo suficiente  - pregunto intentando romper el incomodo silencio